HFC hace grupo
La empresa culmina una reorganización interna que divide las diferentes áreas de negocio a las que atiende y que busca avanzar en la multidisciplinaridad para cubrir los servicios cada vez más especializados que demanda el mercado.
Texto de Jose Ramón Esquiaga @josesquiaga
Habituada a anticiparse a las tendencias y a guiar a sus clientes por el laberinto de los mercados, HFC ha culminado un proceso de reestructuración interna en el que ha puesto a prueba todas sus destrezas. Con un catálogo de producto que desborda los márgenes del concepto tradicional de consultoría, el objetivo que persigue la empresa es avanzar hacia una mayor especialización en los servicios, incorporando además aquellos que demanda el mercado en cada momento, y hacerlo sin perder la concepción integral de la relación con el cliente. El reto de cubrir simultáneamente frentes aparentemente tan antagónicos ha llevado a crear cuatro sociedades distintas, una por cada área de negocio, pero preparadas para trabajar conjuntamente para dar una respuesta única al cliente, trasladando el concepto de ‘llave en mano’ al ámbito de los servicios a la empresa. El proceso ha incluido una remodelación de instalaciones, culminada a comienzos de año y que ha marcado –cuanto menos en sus aspectos más visibles– el antes y el después en la transformación de la empresa.
Integradas bajo la marca común de HFC Consultores operan cuatro empresas –HFC Legal, HFC Perspectiva Empresarial, Centro Fiscal y HFC Servicios de Auditoría– que además de atender a sus correspondientes mercados buscan en la multidisciplinariedad su principal argumento competitivo. Se trata de un enfoque que se complementa con las alianzas estratégicas con partners que cubren aquellas áreas a las que no se llega con recursos propios, en una estrategia que –como es el caso de la tecnológica CIC Consulting– se concreta en ocasiones en forma de participación societaria. La tecnología tiene, de hecho, una posición central en los planteamientos de HFC, con una presencia transversal en todo el catálogo de productos.
Equipos multidisciplinares
La idea de la multidisciplinariedad tiene un protagonismo central en el diseño de empresa que ha realizado HFC, y sobre todo en la forma en que esa reorganización se concreta en los productos. Según explican los responsables de HFC, se trata tanto de dar respuesta a demandas concretas de los clientes como de generar productos complejos, que integran componentes de varias áreas. Es un enfoque propio de las grandes consultorías –casi siempre multinacionales con una actividad muy enfocada a las grandes cuentas– que en la empresa cántabra están convencidos de ser capaces de replicar a una escala más adecuada para dar servicio a las pymes. “Lo habitual es que empresas como la nuestra nazcan con un perfil muy económico, como asesorías fiscales y contables, y que para el resto de necesidades opten por profesionales externos”, señala Ramón Cifrián, socio director de HFC, que recuerda que ese fue también el caso de ésta: “Ahora cada área funciona por sí sola, pero al mismo tiempo, cuando surgen encargos concretos que precisan de ello, podemos formar un equipo. No tenemos que trasladar información a un tercero, con lo que ganas tiempo y mejoras el servicio al cliente, al que además puedes presentarle presupuestos más ajustados. Hay ventajas para todas las partes”.
El desarrollo y puesta en marcha de la nueva estructura ha tenido un largo recorrido en el tiempo, que ha tenido su última fase en la transformación y ampliación de las instalaciones. Una etapa que se inició al pasado verano, que culminó a comienzos de este año y que, pese a que ha dado un vuelco completo a las oficinas, se desarrolló simultaneando las obras con el trabajo diario. Las grandes salas de reuniones con mesas corridas ocupan la mayor parte del espacio, en detrimento de los despachos que prácticamente han desaparecido en un diseño que no responde a cuestiones estéticas: “La idea es potenciar el trabajo en equipo y la comunicación. Además el 80% de nuestro trabajo se realiza fuera de estas oficinas, que entendemos que son un punto de encuentro de los profesionales y de estos con los clientes. De ahí que contemos con cinco salas de reuniones, con puntos en los que conectas el ordenador y listo. Los despachos tienen muy poco sentido, de hecho no nos hemos atrevido a quitarlos porque todavía hay situaciones que lo piden, pero acabarán por desaparecer”, asegura Manuel de la Fuente, socio director de HFC. La reestructuración ha implicado también la incorporación de seis nuevos profesionales, con lo que lo que la plantilla del conjunto del grupo –que no ha realizado ningún ajuste a causa de la crisis– supera la veintena de trabajadores.
La combinación entre la visión integral del servicio y la especialización encuentra campos de aplicación en todos los sectores y en las más variadas actividades, pero probablemente los ejemplos más llamativos los proporciona la hostelería. Los equipos multidisciplinares de HFC han trabajado en la puesta en marcha de proyectos de restauración que incluían todas las fases del negocio, desde aquellas relacionadas con la puesta en marcha de la sociedad –comunes a cualquier otra empresa– hasta el diseño del establecimiento, la composición de la carta y la cuantía de los precios, pasando por la búsqueda de financiación o de las mejores soluciones tecnológicas disponibles.
Tecnología: un papel básico
La aportación de la tecnología, mediante la asociación estratégica con CIC Consulting, permite la incorporación de nuevos productos que igualmente se benefician de los equipos multidisciplinares del grupo. Una de las especialidades de HFC es la economía forense, una disciplina que requiere elaborar informes probatorios, bien por encargo de un juez o por una empresa que sospecha la existencia de cualquier tipo de irregularidad. La progresiva desaparición del papel y el uso de las tecnologías de la información, explica Ramón Cifrián, ha cambiado totalmente la labor en ese campo: “Ahora el trabajo requiere rastrear los flujos de información y comunicaciones que se generan digitalmente. Ese trabajo requiere personas que conozcan a fondo las herramientas tecnológicas y otras que sepan qué buscar y sepan ofrecer los resultados con criterios lógicos”. Esa labor de equipo, y la aportación de CIC, se ha concretado en el desarrollo de herramientas informáticas específicamente concebidas para hacer pruebas periciales, en búsquedas diseñadas y dirigidas por los profesionales de las diferentes áreas que cubre HFC. “Esto es algo que hasta ahora solo ofrecían las grandes firmas de consultoría y que estaba solo al alcance de grandes empresas, pero que nosotros estamos en condiciones de trasladar a nuestro entorno, pymes que a su escala tienen esas mismas necesidades. para darle respuesta trabajan juntos informáticos, abogados y economistas. Esa es la multidisciplinariedad que buscamos”, concluye.