Seficosa crece en su aniversario

Cuando se cumplen 45 años desde su fundación, la asesoría que creara Carlos López d’Hers es hoy cabecera de un grupo que cuenta con su una correduría de seguros y que opera en el ámbito de la consultoría energética a través de una empresa propia, en una estrategia que tiene como objetivo la búsqueda de la máxima eficiencia y el ahorro para sus clientes. En esa línea, y atendiendo los requerimientos de un mercado que exige cada vez una mayor especialización, Seficosa ha desarrollado un centro de cálculo con el que dar servicio al departamento laboral tanto de empresas como de otras asesorías.

José Ramón Esquiaga |  @josesquiaga | Julio 2019

En los cinco años que median entre la conmemoración de su 40 aniversario en 2014 y la celebración que volvió a reunir el pasado 24 de mayo a la plantilla de Seficosa para brindar por una efeméride señalada, la asesoría que fundara Carlos López d`Hers en 1974 ha sumado servicios a su catálogo, empresas a su grupo y, sobre todo, ha ayudado a sus clientes a enfrentar una situación económica convulsa, acompañándolos en la salida de una crisis que venía a sumarse a las vividas en sus cuatro décadas y media de existencia. En ese tiempo la normativa fiscal y laboral ha cambiado de forma especialmente acelerada, encadenando reformas y aumentando la responsabilidad y la carga de trabajo de los asesores, situando a esta actividad ante el desafío de mantener la calidad del servicio sin disparar sus costes, algo especialmente complicado en un sector en el que las microempresas siguen siendo mayoritarias. Seficosa ha sido especialmente activa en la búsqueda de respuestas a ese reto, identificando algunas oportunidades ligadas a la nueva situación del mercado y abriendo nuevas vías en ese objetivo de lograr la máxima eficiencia en el uso de los recursos.

Con oficinas en varias localidades de Cantabria y con actividad en toda España, Seficosa cuenta hoy con una plantilla de 40 trabajadores, y es cabecera de un grupo empresarial que cuenta que cuenta con correduría de seguros y una gestoría energética. En conjunto, el grupo está en condiciones de prestar un amplio catálogo de servicios, que a las habituales asesorías laboral, fiscal y contable, suma la auditoría y la consultoría de amplio espectro, incluyendo la gestión de la cartera de seguros o la búsqueda de las mejores tarifas energéticas para sus clientes. Aunque fundada en 2013, la gestoría energética SoyYou ha tenido su principal desarrollo en el último lustro, y ha sido por tanto una de las grandes protagonistas en la etapa que el grupo ha cubierto desde la celebración de su cuadragésimo aniversario hasta hoy. Es también especialmente representativa como muestra de la búsqueda de oportunidades en actividades que tienen una repercusión directa en la reducción de gastos que no añaden valor a sus clientes.

Carlos López d´Hers, fundador y presidente del Grupo Seficosa

“En España operan 258 comercializadoras de energía –explica Carlos López d’Hers, presidente del grupo Seficosa– nosotros concertamos tarifas con 10 o 12 de ellas, para garantizar precio por un año. Ese es que trasladamos a nuestros clientes”. El proceso, subraya López d’Hers, es transparente y no tiene ni coste, ni riesgo para la empresa que lo contrata. Con carácter previo, Soy analiza y lo que su cliente está pagando, y a partir de ahí le traslada la oferta que ha conseguido de las comercializadoras energéticas, y es él el que escoge. La gestoría energética de Seficosa cobra por sus servicios a las vendedoras de electricidad y gas, no a sus usuarios. “Somos asesores, luego que el cliente decida. Pero para hacerlo tiene que tener toda la información, y ese también es nuestro trabajo. Esto, que es así en todo lo que tiene que ver con la actividad de una empresa y que por tanto forma parte de nuestra labor desde siempre, lo hemos trasladado también al ámbito de la energía”.

La plantilla durante la celebración del 45 aniversario, que tuvo lugar en el Hotel Balneario de Puente Viesgo el pasado 24 de mayo.

La confianza, el manejo de información y la eficiencia en el uso de la misma son las claves sobre las que históricamente ha pivotado la actividad de asesoramiento, pero la llegada de la tecnología y los nuevos usos que ha implantado la Administración en su relación con las empresas han cambiado las reglas de juego y han tenido un impacto directo en la actividad. “Se ha perdido mucho contacto humano en las relaciones entre el asesor, la empresa y la Administración. En paralelo, esta nos ha trasladado gran parte de la responsabilidad en las comunicaciones con las empresas, y todo en un contexto de cambios legales constantes. El resultado es que las asesorías necesitamos más personal, mejor formado y con la obligación de mantenerse al día actualizando constantemente sus conocimientos”, indica el fundador y gerente de Seficosa, que explica que todo ello tiene un inevitable impacto en los costes de la actividad y obliga a una especialización inalcanzable para los pequeños despachos: “Nadie puede saber de todo, la pequeña asesoría con dos o tres trabajadores está llamada a desaparecer”.

Frente a ello, apunta Carlos López d’Hers, las opciones son el crecimiento y la colaboración, bien mediante fusiones o bien a través de la externalización de servicios, una opción está última que Seficosa a explorado con éxito a través en su departamento laboral. “Contamos con un centro de cálculo en el que trabajan diez personas, y que elabora alrededor de 4.500 nóminas al mes, para nuestras empresas clientes, pero también para otras asesorías, que pueden cubrir así este servicios a un coste muy inferior al que tendría si lo asumen directamente”.

Buscar la máxima eficiencia y lograr ahorros en todos los gastos que no inciden en la competitividad son objetivos que siempre han formado parte de la estrategia de las empresas, pero que han ganado protagonismo tras la última crisis. Los efectos de esta, explica Carlos López d’Hers, se notan en muchos otros aspectos que se constatan en el día a día de la labor de una asesoría. Entre ellos, el fundador de Seficosa, destaca sobre todo la prudencia con la que las empresas acometen cualquier decisión con efectos a largo plazo, algo que tiene un difícil encaje con algunos condicionantes legales y políticos con los que conviven los empresarios españoles. Carlos López d’Hers destaca sobre todo la rígida legislación laboral, poco adecuada a su juicio para adecuarse a las cambiantes necesidades que hoy tienen las empresas, una formación que no responde a las necesidades del mercado y las incertidumbres en el cobro: “Si se habilitase dentro de Juzgado de lo Mercantil un área de impagados, en la que en una vista rápida cada una de las partes podría exponer sus razones, negociar y dar un tiempo para el pago, estoy convencido que se solucionarían buena parte de esos conflictos y se generaría confianza. Eso incrementaría la facturación y tendría un impacto directo en la contratación”.